En Colombia apenas está cogiendo vuelo el parapentismo, deporte que consiste en tirarse desde una alta montaña en una cometa de tela gruesa y ,esquivando vientos y corrientes, recorrer determinados tramos. En Roldanillo,ese deporte se fue volviendo un atractivo turístico y si bien cada año todo el mes de enero ha quedado dedicado a recibir centenares de parapentistas de todo el mundo, durante el resto del año son miles y miles los turistas que se montan en esos aparatos, sin motor ,a sentir el vértigo o la felicidad de la libertad en el aire.
Como obviamente este país fue reglamentado aéreamente para otros menesteres, la abundancia de los parapentistas en el cielo vallecaucano ha preocupado a la Fuerza Aérea Colombiana, que con tres o cuatro avioncitos mentor de la primera guerra mundial, todavía les enseña a sus pilotos usando el aeropuerto de Farfán en Tuluá, y con la sapiencia y metodología que les dejaron a los militares,andan buscando darle una golpiza al parapentismo en Roldanillo y hasta acabarlo por decreto del Ministerio de Defensa.
Dado que no existe reglamento ni de la Aerocivil ni de ninguna otra entidad para coordinar radialmente o con carnet de pilotos los vuelos de todos estos deportistas , y así dizque prevenir lo que puede llegar a ser una tragedia,la FAC se ha puesto en la tarea de aparecer como el malo del paseo. No se si por salvar la responsabilidad futura o para que los colombianos nos demos cuenta que los cuatro avioncitos Mentor, con los que dan enseñanza a sus pilotos, deben ser cambiados por aviones más modernos,más seguros y hasta capaces de esquivar a los parapentistas que cruzan con sus coloridos los cielos del Valle del Cauca. Pero lo que si se están ganando desde ya es el fastidio de las gentes de Roldanillo que ven desbaratar su ilusión turística.
@eljodario