Frente a la figura de ANGELINO GARZON, se había creado una especie de mito y muchos estaban convencidos que solo bastaba que anunciara su aspiración, para estar elegido en forma automática alcalde de Cali, pero la realidad política de la ciudad es otra y el protagonista de cambiar la historia es un hombre de origen popular conocido cariñosamente como el «CHONTICO».
A GARZON, la opinión publica lo fue conociendo en su real dimensión, un político hábil, capaz de aliarse con el mismísimo diablo si el acuerdo lo favorecía, los sindicalistas lo desprecian porque lo consideran un «esquirol» que en la jerga de los obreros es sinónimo de traidor; cuesta trabajo creer que ANGELINO fue de izquierda radical, dicen que era comunista, su liderazgo afloro en la siderúrgica Sidelpa donde era obrero; de líder de una central obrera dio el salto a Ministro del trabajo en un gobierno perverso para la clase trabajadora como el de ANDRES PASTRANA, luego fue elegido gobernador del Valle con altisima votación derrotando a un estadista como CARLOS HOLMES TRUJILLO, la diferencia en estructura académica entre uno y otro es abismal, tras su paso por la Gobernación se alió con el peor enemigo de la izquierda, le acepto un cargo internacional al presidente ALVARO URIBE, después también por recomendación del ex presidente, fue compañero de formula de JUAN MANUEL SANTOS y al final de su vicepresidencia, se dio el lujo de expresar públicamente que quería ser alcalde de Cali o Bogota, bueno el discurso en ambas ciudades seria el mismo: «los niños y las niñas, la zona urbana y la zona rural».
ROBERTO ORTIZ esta logrando algo que parecía imposible derrotar la suerte loca de un vivazo como ANGELINO GARZON.
