Más allá de la connotación religiosa que representa la visita del PAPA a BUENAVENTURA, que de por si es importante para los creyentes, la presencia de un personaje de estas características es comparable con la realización de un evento con características orbitales.
El gobierno nacional tendrá que adecuar convenientemente los sitios por donde deambulará el alto prelado y se verá presionado a atender por lo menos las necesidades más urgentes, para que el pontífice no sea el depositario de tantas angustias insatisfechas de sus habitantes. El puerto será distinto luego de la visita del PAPA, los ojos del mundo estarán puestos sobre BUENAVENTURA, pues los cientos de periodistas que cubren un recorrido papal se encargaran para bien o para mal de contarle al planeta la realidad social de este pueblo.
Fue un acierto del gobernador UBEIMAR DELGADO cuando en caliente y apenas conociéndose la visita del jerarca de la iglesia católica al país, no vacilo en hacer pública su invitación formal para que la gira pastoral llegara hasta el deprimido puerto.
A propósito del Gobernador del Valle nos complace registrar su ascenso en la última medición sobre aceptación de los ciudadanos acerca de su gestión de gobierno, DELGADO es un trabajador incansable, bien intencionado y honesto, pero muchas de sus obras se quedan en el anonimato por las deficiencias protuberantes de su oficina de prensa.
