Cuando todos pensábamos que la pesadilla del PIN había desaparecido de la política regional, con el jefe de la banda en la cárcel y sus principales «lava perros» sancionados ejemplarmente por la Procuraduría general; oh sorpresa, como salidos del mundo de las tinieblas reaparecieron dos «joyitas» de ingrata recordación camuflados de liberales y con voz y voto para incidir en la escogencia de los candidatos de ese partido a alcaldía y gobernación.
En desarrollo del último comité, JULIO CESAR MARTINEZ , se mostró indignado por que ROBERTO ORTIZ señalo que ese partido parecía un banco para hacer transacciones; él que se sintió tan cómodo teniendo como patrón a JUAN CARLOS MARTINEZ prisionero por parapolítica y narcotráfico, ahora posa de digno ante una verdad colosal, como la enrostrada por el «CHONTICO» y el otro JUAN CARLOS ABADIA destituido de la gobernación, sin ningún rubor de su puño y letra redactó un documento pidiendo a la dirección liberal desconocer los resultados de las encuestas para la escogencia de candidato a la alcaldía de Cali.
Ese partido liberal es una alcantarilla, sus directivos defendiendo sus propios intereses, lo único que les importa es garantizar sus cuotas en burocracia y contratos. Tienen al mejor candidato y se le atraviesan, no les importa, escoger al peor, porque luego con ese aval negocian con el aspirante que pueda ganar y les garantice su porción de poder.
El pueblo liberal no les va a perdonar la bellaquería que le quieren hacer a ROBERTO ORTIZ, ese señor ya tiene el aval de la gente que lo quiere ver como alcalde.