El nuestro es un País inviable, aquí se perdió la confianza en todo, no hay respeto por nadie y cada quien maneja su propia verdad, las redes se han convertido en un paredón de fusilamiento donde se denigra e insulta a todo mundo, está en mora la autoridad de meter en cintura a estos “valientes” del internet que se escudan en perfiles falsos y en el anonimato para calumniar.
¿Cómo así que, si la justicia toca a Uribe, incendian al País? Esto es territorio arrasado, la ley del talión, el lejano oeste, se desafía de esta manera a la corte suprema de justicia y no pasa nada. No deben existir ciudadanos inmunes al escrutinio de la justicia, no todos los funcionarios de la rama judicial son corruptos, hay cientos muy buenos, competentes y honestos; la estrategia del Centro democrático es desprestigiar a los magistrados que tienen en sus manos la suerte del expresidente Uribe, de antemano descalifican sus fallos, “amarrando los perros” por si la decisión le es adversa.
En otro tema, muy desquiciados están nuestros muchachos, los famosos retos en las redes están tomando características suicidas y demenciales, ahora lo de moda es tener relaciones sexuales sin protección con una persona infectada de Sida, buscando de manera premeditada el contagio, el que lo hace es mirado como valiente y osado, es la forma de los jóvenes de expresar su poco interés por la vida, todo les da igual.
